martes, 22 de enero de 2013

My love.


Título: My love. 
Autor: EunKyo
Pareja: YooSu
Género: Slash, Romance, Drama.
Extensión: One-Shot



Junsu odiaba sentirse ignorado por Yoochun, pero no podía pedirle más atención de la que él le brindaba. La razón, simple, solo son amigos, no existe otro tipo de relación entre ellos. Pero Junsu amaba a Park. Lo que representaba un gran problema; porque estaba tan acostumbrado a estar en su compañía, a tener su atención y cuando no la tenía Junsu se molestaba con él y el mundo entero. Porque era ahí, cuando la realidad cruel e inexorable se presentaba ante sus ojos, ahí y en las pláticas del pelinegro sobre sus conquistas y sus admiradoras… el castaño solo sonreía y aguantaba el dolor que oprimía su pecho. 

Tal vez le gustaba sufrir y es por eso que seguía ahí, porque soportar todo eso… no solo es por amor. Amar en silencio duele… pero Junsu sentía que lo mataban a diario. Saber que ese otro día le robara un beso una de sus amigas… solo hizo sentirlo peor… fue ahí donde supo que nunca llegaría a ser algo más que su amigo.  

“Todas esas sonrisas… nunca serán completamente para mi” susurro para sí, mientras caminaba hacia su casa. El castaño se encontraba demasiado triste, quería dejar de quererlo, anhelaba olvidar el deseo de besar sus gruesos labios. Pero… si pasaba la mayor parte de su tiempo con él, no sería nada sencillo.  Llego a casa y ahí se encontraba Park, charlando amenamente con su hermano JunHo y con su madre; respiro hondo y solo negó con la cabeza… “Así nunca, saldrás de mi corazón” se dijo a sí mismo.

El hecho de que Park lo frecuentara, salieran juntos y se comportaba como su novio…solo hacia enloquecer mas a Kim, pues a veces llegaba a creer que en verdad sentía algo por él. Pero otras ocasiones, a este venia a contarle que saldría con tal o cual chica. 
Junsu solo podía aguantar, que mas podía hacer?, deseaba siempre que sus citas salieran mal… que la chica le desagradara en algo. 

Y su Yoochun volvía a su lado, como debería de ser siempre. Kim estaba confundido, no sabe que pensar desde aquel día que Park quería que jugaran semana inglesa en la escuela… o el día que los roces inocentes en el cuerpo del otro lo hicieron suspirar y jadear levemente, en verdad le estaba gustando como lo toco?

La cabeza le era un lío, pensaba que moriría por darle tantas vueltas al asunto. “Porque estas tan serio, Susu?”  Le pregunto Park con gesto serio y un poco preocupado. 
“No estoy serio” sonrió ligeramente, pero su falsa sonrisa fue delatada por esos ojos avellana que lucían apagados.  

Park rápidamente sostuvo la barbilla de de Kim, quien se rehuía a mirarlo a los ojos. “Vamos Su, dime que sucede…” en los ojos del castaño comenzaban a ponerse cristalinos.
“Na-da” la voz se le quebró justo cuando no quería, trato de huir de ahí, pero los brazos fuertes de ese quien es su gran y único amor lo detuvieron, rodeándolo con fuerza…  pasaron unos minutos y seguían así, simplemente abrazados sin medir palabra. Sentían la calidez que el otro le brindaba, la calidez que regodeaba en su corazón, por el solo hecho de estar así. El ritmo cardiaco de ambos iba al unísono…  un ritmo que se acelero cuando sus miradas se encontraron nuevamente. Park carraspeo y comenzó a decir: “Junsu, tengo tantas cosas que decirte que no por donde comenzar…” suspiro y Junsu miro con atención su rostro, los nervios le recorrieron  el cuerpo entero y pensar con claridad se le dificultaba.

“Debí habértelo dicho antes, he dejado pasar el tiempo, tiempo que no considerare perdido; pero tenía que estar completamente seguro de que esto que mi corazón guarda por ti, es real. Lo he comprobado ya en varias ocasiones, pero no encontraba el valor para confesarlo, me duele en el alma cuando estas así serio y triste, me duele a horrores no ver en tu rostro una sonrisa, esa sonrisa que ilumina tus bellos ojos avellana…”

Junsu sintió sus mejillas húmedas, las lágrimas descendían por ellas sin piedad alguna. Las palabras del pelinegro hicieron eco en sus pensamientos, sus ojos estaban abiertos desmesuradamente y su pulso acelerado como su hubiera corrido un maratón.  Sus labios formaban una linda mueca de asombro y por más que quería no podía articular palabra alguna.

“Hemos sido amigos  por un largo tiempo, pero desde la primera vez que te vi, me sentí atraído hacia ti. Tu peculiar risa, tus ojos, tus labios rosados, tu forma tan inocente de actuar, todo en ti me pareció maravilloso. Te amo Susu-ah, moría por decírtelo cada vez que sonreías tan tiernamente, en cada ocasión que te abrazaba, cuando haces algún puchero…mordía mis labios para acallar las palabras que de mi garganta brotaban con naturalidad.”
“Yoochunnie-ah… sabes, yo actuaba como un tonto, un tonto que se enamoro de su mejor amigo, al que siempre le preguntaban si era su novio, se enamoro del atractivo y seductor Park Yoochun, que para mí no era como todo el mundo cree…para mí, es la mejor persona en este mundo, es alguien que me hace sentir seguro, que me protege y cuida…que ahora se me ama…”

Ambos con nerviosismo fueron rompiendo la poca distancia que existía entre ese juego de suaves labios. Compartieron así su primero beso, lleno de ternura y aun con dudas, de nerviosismo y ansiedad.
El mundo se desvaneció para ellos, solo importaba el hecho de estar juntos compartiendo sus sentimientos, que son correspondidos por el otro.

“Junsu-ah, tengo que hacerlo formalmente… quieres ser mi novio?” pregunto finalmente Park después de compartir un par de besos cortos y suaves con el menor. Junsu sonrió y agito su cabeza con efusividad “Sii~ Chunnie Si quiero~” se colgó aun más de su cuello y beso suavemente los gruesos labios de Park, que rio por la respuesta y el sonrojo que tenía su ahora NOVIO.
“Te amo Susu baby~ siempre lo hare” dice convencido de que será así, y se lo recordaría a diario.

Fin. 

Stand by U.



Título: Stand by U.
 
Autor: EunKyo
Pareja: YooSu
Género: Slash, Romance.
Advertencia: Lemon (¿?)
Extensión: One-Shot



Que es la peor parte de ser ignorado por la persona amada?  O es peor el hecho de que no te ignora, simplemente no sabe lo que sientes por ella y solo eres un compañero de clase más.

Él es el chico más guapo y sexy de la escuela  (y no soy el único que lo piensa) pero a su misma vez es alguien tierno, inocente y vergonzoso. Era en cierto punto popular con las chicas, incluso algunos chicos querían salir con él. Yo no era feo, pero como decirlo,  soy más bien del tipo ratón de biblioteca, me apasiona leer más que jugar algún deporte, solo hacia el ejercicio necesario para mantener un buen estado de salud.

Mi adorado niño, era el capitán del equipo de futbol, en ocasiones iba a verlo jugar o en las prácticas.  Su cuerpo era curvilíneo, era demasiado tentador… un par de veces tuve que aliviar el dolor de mi entrepierna manualmente, ya que ni con las duchas de agua fría bajaba, él simplemente sacaba a relucir mis deseos más profundos, mi deseo por él se incrementaba con el paso del tiempo, yo seguía con mi idiotez de no acercarme a él.

Un día como cualquier otro en la clase de biología, el maestro índico que elaboraríamos un trabajo en parejas, comenzó a hacer las parejas  por su cuenta… y grande fue mi sorpresa al escuchar  mi nombre enseguida del de mi baby.
Junsu volteo sonriente hacia mí, yo seguía sumergido en todo ese mar de emociones encontradas, solo logre fijar mis orbes oscuras en él.  Al final de la clase se acerco para organizarnos con lo del trabajo, pero fue tan fácil perderme en su mirada y en su cálida sonrisa. Al final acordamos reunirnos en el almuerzo para acordar todo sobre el trabajo.

Estar sentado a su lado era realmente un sueño hecho realidad… empezamos a conversamos sobre cosas triviales, comenzamos a conocernos un poco más. Hacia apuntes mentales de las cosas que le gustaban, así como lo que disfrutaba hacer…  bailar era una de sus “pasiones”. En mi mente se reproducían imágenes de Junsu bailando, tuve que controlar mi imaginación un poco antes de que llegara a tener un problema en mis pantalones.
El tiempo desayunando se nos fue volando, o eso me pareció porque pasar un tiempo con él fue grandioso.  Acordamos juntarnos mañana a la salida para comenzar a elaborar el trabajo, nos reuniríamos en la casa de él.   
     Desde ese momento todo cambio, le hablaba más. Yo era más feliz ahora, al menos era su amigo y ese era un buen comienzo.  Realmente era una persona agradable, eso solo hacía que mi amor creciera aun más. 
   
- eres realmente gracioso- dije después de que me contara unos cuantos chistes, que si bien no eran del todo buenos él hacía que lo fuera, su risa era escandalosa, pero era como música angelical a mis oídos.
–oh Chun, solo te estás burlando de mi–  dijo adorablemente.  Ese mote en sus labios suena tan lindo.
– no podría hacerlo nunca–  dije seriamente, y es que como podría burlarme de él? – Me refería que eres divertido – dije tranquilamente y con una sonrisa en mi rostro.     
Hizo un mohín con sus labios y luego dijo – y ahora resulta que soy un amargado? Aishh~ –
– Claro que no!! – dije en un intento frustrado de defender mi posición
– hahaha, tranquilízate solo bromeaba, sé que soy adorableee~ – balbuceo  en un tono cantarín. 
– Que humilde resultaste – masculle entre dientes con cara de enfado aunque quisiera carcajearme al ver su rostro fruncir el ceño de manera tierna.
– aish~ que irritantee!! , solo dije algo que todos dicen de mí, no es como que yo piense que es cierto – al decir esto se levanto y comenzó  a caminar, de inmediato lo seguí.
– espera no quise molestarte, solo intentaba que fuéramos amigos – susurre casi inaudiblemente, detuve mis paso era inútil – lo siento junsu-shi –  mi expresión denotaba lo decepcionado que me encontraba.
Se detuvo al oír mis palabras y regreso ese par de pasos que nos separaban, por  su serio rostro pensé que solo se largaría sin más. Sin embargo, me dedico una sonrisa cálida y me sorprendió que me abrazara, estaba en shock, porque? Estaba siendo abrazado por él. Mi corazón latía aprisa y es que fue algo inesperado.
 – lo siento Yoochun hyung, suelo ser infantil en ocasiones – sentir su aliento rozar mi nuca, fue una sensación electrizante, nunca había sentido esa corriente recorrer mi cuerpo de pies a cabeza. Mis manos rodearon delicadamente su cintura. Se sentía tan exquisito ser abrazado por Susu
Me sorprendió escuchar  un sollozo de su parte e inmediatamente volteé a mirar su rostro pero no me dejo y se escondió en la curvatura de mi cuello, haciéndome cosquillas en el proceso.  Gire su barbilla con una mano y la otra seguía sosteniendo su cintura.  Pequeñas lágrimas querían salir de sus lindos ojitos. Limpie con mi pulgar esa lágrima rebelde que bajaba por su mejilla derecha. Una única pregunta rondaba por mi cabeza… ¿Por qué lloraba?
–Tranquilo – dije desconcertado aun por las gotas salinas que brotaban a mayor número de sus ojos. ¿Qué debía haceeeer? –  Susu porque… lloras? – susurre despacio y con la voz temblorosa.
Yoochun, yo… amm yo… y-yo – solo tartamudeaba sin poder evitar que las lágrimas pararan de caer, levanto su vista, nos miramos un momento, mi corazón latía más aprisa al ver un brillo especial en esos ojos hermosos  ― Chun, tú me- me gustas ― termino de decir en un susurro, pero demonios dijo que le gusto?!
Mis brazos cayeron a mis costados, mi mirada se perdió, estaba completamente ido. Mi cerebro colapso, nunca hubiera esperado algo así, nunca se me paso por la mente que le gustara es que somos tan diferentes ó tal vez no lo seamos tanto.
―Chunnie ― sentí sus manos en mis mejillas y regrese a la realidad, una sonrisa apareció en mis labios y en los de él también ― Chunnie?
Susu, tu también me gustas, me has gustado desde hace tiempo― mi voz sonaba ronca y algunas lágrimas se abrían camino por mis mejillas ― Te amo, Susu.

― Chunnie! Porque no me hablabas, yo pensé que me odiabas que era un chiquillo para ti.
―Si no te hablaba tenlo por seguro que no era por eso, no podía acercarme a ti, tu un chico hermoso, popular, siempre pensé que tú querías a alguien mejor. En ocasiones iba a ver los partidos solo por verte jugar.
― La verdad es que si te había notado, pero nunca me imagine que ibas por mí, y claro que no soy popular ni hermoso ―  dijo sonrojándose tiernamente   tú sí que lo eres, eres el más guapo de la escuela y todas se mueren por ti.
― Digan lo que digan, yo solo te quiero a ti. Yo era el que moría por estar a tu lado, por ser a quien le dediques tus más bellas sonrisas, ser el que reciba toda tu atención y ser el único al que ames ― pese a todo declare todo lo que sentía por él, moría de vergüenza  pero tenía que decirlo, si no era ahora tal vez nunca.
― Me haces tan feliz, deseo también estar a tu lado Yoochun-ah.
―Kim Junsu, ahora tengo que hacer la pregunta más importante: quieres ser mi novio? ― le dije enfatizando un poco en la palabra novio, si por mi fuera le pediría matrimonio pero es muy precipitado.
―Chunnie, claro que sí ― contesto efusivamente y sus manos rodearon mi cuello, rápidamente abrace su delgada cintura estrechándolo hacia mi fuertemente.

Mis labios buscaron a sus iguales, encontrándose y comenzando una baile lento y acompasado que solo trasmitía todo ese amor que sentíamos el uno por el otro y que duro guardado un par de años, pero eso no hizo que disminuyera, por el contrario aumentara y se fortaleciera.

Al separarnos, solo podía decirle cuanto lo amaba y dar pequeños besos por todo su rostro sonrojado. Por fin comenzaría la historia entre nosotros que siempre había imaginado en las clases, ya no sería solo un sueño, porque se había convertido en una hermosa realidad.   

Después de un tiempo…

Oh! Les cuento el trabajo salió perfecto y fue el mejor de la clase, ese día que nos reunimos en mi casa paso algo que… les contare enseguida. Los dos estábamos en mi cuarto elaborado el trabajo, ya llevábamos algún tiempo en ello, así que nos tomamos un pequeño descanso.

Solo conversábamos, yo estaba sentado en la cama y él en la silla del escritorio, vino hacia mí y tomo nuestras manos entrelazándolas, de un momento a otro solo nos mirábamos y el silencio que compartíamos no era incomodo, los dos nos sonrojamos mientras unas sonrisas bobas se plasmaban en nuestros labios. Tome su rostro en mis manos y acerque su rostro al mío, lo suficiente como para sentir su respiración en mi rostro. Acabe con la distancia y di inicio a ese baile, el cual nuestros labios eran los principales actores, era un beso dulce, lleno de esos sentimientos que ambos profesábamos, de un momento a otro cobro intensidad, convirtiéndose en uno más fogoso y apasionado. 

Lo tome por la cintura y lo senté sobre mi regazo, Junsu rodeo mi cuello con sus brazos, momentos después termino el contacto por falta de aire, a los pocos segundos dimos comienzo a otro igual de apasionado. Mis manos inquietas recorrían su espalda de arriba abajo, deslice mis labios por su mentón y cuello, dejando pequeñas marcas rojizas sobre él, pequeños jadeos salía ya de sus rojos e hinchados labios, apreté su gran trasero bien formado, dio un sobresalto al sentir mis manos en el. Me “emocione” aun mas cuando al seguir en mi labor de besar y mordisquear su clavícula y acariciar su espalda y trasero, Junsu, MI Junsu, profería esos enloquecedores sonidos de placer.  Separe –aunque reticente- mis labios de su cuello, para admirar esas facciones llenas de gozo. Esto era mil veces mejor que el más caldeante de mis sueños.   
     
Mis manos recién navegaban por debajo de su polo, sus incesantes jadeos y gemidos entorpecían mis sentidos. Pero algo que no esperaba y Junsu menos, fueron esos toquecitos en la puerta, me quede petrificado y Junsu también.

Mi madre se encontraba al otro lado de la puerta, la excitación se fue hasta el suelo. Le arregle la ropa, y él se bajo de mi regazo, para cuando mi madre entro a la recamara, nos encontrábamos trabajando en el proyecto sonrojados y aun agitados.  Ella ya sabía que Junsu era mi amor. Y no dijo nada al respecto sobre lo acalorados que estábamos.  Al salir Junsu comenzó a hacerme un berrinche, sobre que estaba mal lo que estábamos haciendo y que era un pervertido y cosas así.  Después de eso, tres meses han pasado ya y no me deja tocarlo demasiado, la causa? Sigue avergonzado por lo que paso y a mi madre no le sostiene la mirada, se sonroja y su timidez sale a flote.    

Le he dicho miles de veces que es normal, que no tiene de que avergonzarse, que a mí también me da pena, y mil cosas pero aun no quiere.
El tiempo siguió pasando y yo estaba aun más enamorado de Junsu, teníamos citas, a veces salíamos al cine, otras a comer un helado y en ocasiones simplemente íbamos al parque cerca de su casa. Los besos, abrazos y una que otra caricia furtiva se hacían presentes siempre y la respuesta por parte de Junsu eran casi siempre esas mejillas arreboladas en carmesí y risas nerviosas, en conclusión el solo se avergonzaba. Cierto día nos encontrábamos en su habitación, sus padres habían salido junto con su gemelo, así que estábamos solos en la casa.

Me senté en su cama, en lo que él dejaba su mochila en el escritorio, grande fue mi sorpresa al verlo comenzar a sentarse a horcajadas sobre mis piernas, enarque las cejas y una sonrisa divertida bailo en mis labios, haciendo con ese gesto una pregunta que Junsu solo se dedico a ignorar con una sonrisa que dejaba entre ver sus intenciones, entrelazo sus dedos detrás en mi nuca y me beso de manera tranquila pero que fue en aumento y se torno más apasionado, mis manos abrazaron esa cintura exquisita sin atreverme a llegar a mas, pero fue el mismo Junsu quien quitando sus manos de mi por un momento se quito la polo y puso  sobre su torso mis manos incitándome a tocar…

Solo cabía en mi mente dos opciones: una era que lo que sucedía era un sueño y dos en verdad estaba ocurriendo, pero Dioooss! Qué hermoso es, me encontraba perplejo y mis manos acariciaron con parsimonia cada parte de su torso tratando de guardar en mi memoria la tersa textura de su piel y sus estremecimientos, mis labios que ocupados estaban con los suyos se deslizaron por su mentón dejando un camino húmedo que llegaba a su cuello, pasaron por parte de su clavícula y descendieron aún más hacia esos botones rosados, ansioso juguetee con uno y luego con el otro dejándome escuchar esos ronroneos y tímidos gemidos de placer que dejaba escara un Junsu sonrojado y con la respiración entrecortada, continúe el recorrido cuesta abajo y antes de llegar al ombligo, me detuve y obtuve un respingo por parte de Su.

-Shh baby, tan solo te recostare- y lo hice y pareció estar más cómodo- eres tan hermoso Junsu, Te amo.
-Chuuunn también Te amo, y tú eres más guapo y hermoso que yo- me jalo y dio inicio a un baile enloquecedor en el cual nuestros labios eran la pareja principal, sus manos se situaron bajo mi polo, para comenzar a subirla y tantear bajo de ella. Me descoloco totalmente, mis ya de por si nublados sentidos lo hicieron aún más, deje de ocuparme de él para disfrutar de esos dedos que con nerviosismo recorrían mi piel.
-Jun..Jun-suu ahh- no lograba decir algo coherente, solo podía jadear y hablar entrecortadamente. Mi polo cayó en algún lugar de la habitación, mis manos estaban desabrochando sus pantalones y sus manos hacían lo mismo con los míos. Quite su bóxer y baje los míos, tan pronto lo hice regrese a esos labios suaves como pétalos de rosa, los devore, mientras nuestros cuerpos sentía la fricción que nos llevaba a un éxtasis total. Nuestros miembros se saludaron y rompimos el beso con un par de gemidos saliendo desde lo más profundo de nuestro ser.

Mientras bombeaba su sexo, me dedicaba a recorrer una vez más su cuello y su pecho, todo él era una belleza y una completa delicia, al llegar a su pelvis sus gemidos se incrementaron, deje unas cuantas marcas sobre ella y fui bajando hacia su erección que aun estaba entre mis dedos.

 –Chuuuun, nggh- volví mi vista a él, su rostro estaba rojo, rojo por completo, sus manos tapaban su rostro, pero miraba con expectación a través de sus dedos.- Chunniee q-que vas ha-hacer?
-Solo disfruta baby, se que te gustara.- acaricie sus muslos, me acerque a su rostro y lo bese, antes de proseguir con mi tarea, exhale en la parte superior de su miembro, haciendo que se estremeciera por completo, lamí la punta y continúe hasta llegar a la base.
-Ch..chuun aahh, mm-maaas- su cuerpo temblaba y yo acate su pedido y engullí por completo su miembro, saboreando ese sabor tan único y tan delicioso. Mis dedos se deslizaron a sus testículos para nublarle aun mas los sentidos… el sabor salado del pre semen comenzaba a bajar por mi garganta-Chuun m-mee mmhh co-correree- sus manos llegaron a mi cabeza y daban pequeños tirones para que no me separara de él, quería probar su esencia, seguí succionando de él, como si fuera una paleta, que debo decir es la más deliciosa que haya probado alguna vez, tan ocupado como estaba olvide el pequeño gran problema que tenia entre mis piernas… me encargue yo mismo, mientras me bombeaba mi miembro, mi boca tragaba ese pedazo de carne caliente.
-Chuuuuun!- con un fuerte grito Junsu llego a su orgasmo, corriéndose en mi boca, saboree su esencia antes de que pasara por completo en mi garganta. Cuando por fin solté su entrepierna, mis labios atacaron los suyos, dándole a probar de su esencia.
Rompió el beso y dijo- Yo quiero…también
-Que es lo que quieres Susu?- no encontraba las palabras y su sonrojo no solo era por la reciente actividad.
-tú, tu…- señalo hacia mi entrepierna- quiero hacer lo mismo que tu por mí.
 -No es necesario, pasara- bese castamente sus labios y me recosté a su lado en la cama.
-Pero yo quiero, Chuunnn- sus labios formaron unos lindos mohines, que no tarde en besar. No me dio tiempo de detenerlo cuando ya está pegado a mi cuello, y una de sus manos acariciando mi pecho, perdí el control, sus labios en mis botones, fue el comienzo de mi delirio… siguió y su lengua jugo en mi ombligo y descendió aun mas, llegando por fin a donde sus dedos entretenidos estaban, comenzó con pequeñas lamidas, al igual que yo, luego dio pequeñas mordidas juguetonas a la cabeza, no despegaba la mirada de él, de tenerlo ahí, entre mis piernas, dándome el mayor placer que en vi corta vida he tenido, si soñar con que pasaría era fantástico, el que sucediese era más que magnifico, lo tenía por completo en su boca y no tarde mucho en venirme, -oooh hmm Suuuu- al igual que yo tomo todo lo que pudo; una gota se deslizo por su barbilla, para mí fue algo realmente erótico que me dedique a lamer para después poder profanar su boca una vez más, juntando así nuestras esencias. Creando un sabor único y realmente exquisito.

-Chun, te amo mi Chunniee- Junsu chillo después de terminar esa unión que solo albergaba amor en una muestra apasionada.
-Yo también te amo Susu…MI Susu- lo atraje hacia mí para recostarnos.
-Chun, Chun mis padres vendrán…-comenzó a levantarse, lo jale de nuevo hacia mí y dije “Quédate quieto, tan solo será un momento”, esto solo significaba una etapa de vergüenza superada, pero faltaban más, Junsu es tan hermoso con todo y sus berrinches, pucheros y sonrojos por todo.  Esta vez no llegamos muy lejos, pero se habría tiempo más adelante para amarnos completamente.  


Fin. 
      

Punish me


Título: Punish me 
Autor: EunKyo
Pareja: YooSu
Género: Lemon,
Extensión: Two-Shot




Kim había optado por entrar en aquel club llamado “D·Vox” por curiosidad. Y lo que sus ojos un tanto inocentes veían lo dejaron pasmado. Llego a la barra con las mejillas en carmesí y una expresión de asombro total en el rostro.
 Pidió un trago y el barman le sonrió con coquetería. El solo trato de sonreír gentilmente.


***


Desde su lugar tenía una buena vista de todo el club. Paseaba su mirada en busca de algún chico con quien divertirse,  “vaya, parece que tendré a mi nuevo chico” mascullo Park y Jung solo rodo lo ojos mientras seguía “jugando” con su esclavo.

Park se levanto de su asiento, camino con esa seguridad y ferocidad hacia él. Al verlo, supo que daría cualquier cosa, pagaría cualquier costo por tenerlo solo para él, ahora mismo.  Sus ojos ardían en deseo, su lengua humecto sus labios en un gesto demasiado sensual. Aquel chico consiguió que el pelinegro pusiera todo su empeño porque fuera él, su nuevo esclavo.

“Buenas noches” saludo con voz ronca y mirada profunda.
“H-hola” contesto Junsu sonriente y un tanto tímido. Perdiéndose en esa mirada un tanto salvaje y amenazante. 

“Que hace por aquí un chico hermoso como tú, en un lugar peligroso como este?” le sonríe seductor y nota el cambio en la respiración del joven.
“Peligroso?!” exclama intranquilo Junsu, quien se siente incomodo pero atraído por aquel hombre. Park asiente y Junsu se encoje de hombros “solo… me llamo la atención” sin saber porque responde.
“vaya… Mi nombre es Park Yoochun”  tiende su mano para estrecharla, a lo que el pelirrojo no tarda en responder “Kim Junsu”.



POV’S JS

Estaba nervioso, sentí una corriente eléctrica por toda mi columna cuando hice contacto con su mano. El calor lleno mi cuerpo y bebí de un trago el contenido de mi vaso.
Pero solo incremento mi sed. Evite su mirada penetrante y recorrí nuevamente el lugar con la mirada. No era tan inocente como para no saber en qué clase de club me encontraba, BDSM, pero una cosa es saber sobre ello y otra muy distinta ver personas practicándolo a unos centímetros de ti.

Su voz, esa voz profunda y cargada de deseo irrumpió mis pensamientos. “Cuántos años tienes, Junsu-ssi?” pestañe un par de veces y aclare mi garganta antes de responder. “Veintitrés, tu?” su sonrisa se amplio y mi corazón acelero su ritmo. Es escandalosamente guapo y viste muy bien. “veinticinco, quieres bailar un poco?” bailar?, me gustaría… pero estar más cerca de él… Oh diooos. Miro la pista y me sonrojo por ver como unos chicos vestidos con pantalones de cuero bailan provocativamente para su amo, quien los observaba desde su lugar.

Asiento ligeramente sin pensar mucho en ello, su brazo me rodea por la cintura de inmediato y respingo un poco, pero me acostumbro a ese toque sencillo.
La música es buena… comienzo a moverme, el calor aumenta en el ambiente notablemente, la música es tan insinuante…


****

Los roces comenzaron y Yoochun disfrutaba de esos movimientos de cadera por parte de Junsu, su miembro despertaba y ya no existía alguien más para él. Recorrió su espalda con descaro y apretó su trasero. Junsu se paralizo y lo miro inquieto “Tranquilo, baby” Yoochun no lo dejo responder, rompió toda distancia entre ellos y lo beso, de manera algo brusca y apasionada…Kim no se pudo resistir demasiado a tan demandante acción y se entrego al contacto.  Se dejo arrastrar a un lugar un poco apartado de aquel bullicio. Park tomo asiento y de inmediato jalo a Kim para sentarlo en su regazo. Su intensa mirada se clavo en la color miel. Junsu quien se removió incomodo, fue retenido por las fuertes manos del pelinegro, que lo sostuvo de la cintura con ímpetu. Ataco sus labios de nuevo, con la misma intensidad y pasión que antes.

Junsu se dejaba hacer, pues estaba sumergido en una especie de hechizo. Sentía que tenía que hacer lo que el pelinegro le dijese, una corriente eléctrica lo atravesó nuevamente. Una de las manos del mayor, se perdió debajo de la camisa del pelirrojo, acariciando con fervor la piel bajo su tacto, en respuesta Kim jadeaba y mordía su labio evitando así que, los gemidos salieran de su boca.

Yoochun recorría su cuello con besos húmedos, dejando pequeñas marcas rojizas. Probaba tal cual a su presa… “Te deseo, Junsu-ah” jadeo una vez levantaba la polo del menor, siendo los montes rosados de este presa de sus lamidas y mordiscos. Kim solo se retorcía del placer que le otorgaba Park; ese hombre que apenas conoce y le ha hechizado.  

Sin saber en qué momento paso, se encontraban ahora en el departamento del pelinegro.  Junsu se paralizo y sus ojos se abrieron desmesuradamente. “C-como, cuando?” es todo lo que pudo susurrar, mientras Park lo llevaba de la cintura, rumbo a su habitación. “Tranquilo baby, estabas muy calladito, así que asumí que si te gustaría venir conmigo…”  Con una sonrisa hermosa termino de hablar. Los pensamientos de Junsu eran todo una confusión, sus hormonas no ayudaban lo necesario, para poder pensar con mayor claridad, la cercanía de ese hombre, que de nuevo comenzaba a juguetear…no sabía si esto estaba bien o no, no quería darle tantas vueltas al mismo asunto. Así que opto por dejarse llevar por lo que su cuerpo pedía a gritos... un poco de ese placer.

“Tómame Yoochun-ah” fueron las únicas palabras que salieron de esos labios resecos, que se mostraban ansiosos y rosados. El susodicho, beso con más energía la curvatura del cuello de Kim, paseo sus manos por su espalda acariciando más allá de ella, sin pudor alguno sus manos masajeaban el trasero  perfecto de ese chico hermoso; que solo podía jadear y gemir quedito su nombre.

“Solo por hoy seré vainilla solo por ti, vamos baby” Dijo y llevo a Junsu a su gran cama, lo desnudo para luego recostarlo y admirar ese cuerpo que por fin probaría, que está seguro nunca se cansaría de recorrerlo una y otra vez. “Eres… hermoso, realmente muy hermoso, lo sabías?” Mencionaba embelesado,   se acerco y comenzó a acariciar esas piernas, con una lentitud que estaba acabando con Junsu. “Nunca pensé encontrarme con alguien tan perfecto como tú, Junsu ah” Kim solo jadeaba y miraba atento cada movimiento del mayor. Cuando una mano de Park, comenzó a bombear su miembro, su vista se nublo de placer, su cuerpo reaccionaba arqueándose. “Muy bien, disfruta... goza para mi” susurro lamiendo el lóbulo izquierdo del pelirrojo. Aumento  la velocidad con la que masturbaba al menor, consiguiendo que llegara al orgasmo prontamente. “Aaahm Yoochuun hhmnng” Gimió al correrse Junsu, quien trataba de regularizar su respiración; Park lo beso con esa pasión que aun guardaba él. Saboreando cada rincón de esa cavidad bucal. Memorizando cada movimiento de su lengua contra la suya. Disfrutando de esos jadeos que acallaba con su boca, de esas manos que tímidas acariciaban su espalda. “Date la vuelta Junsu-ah” Murmuro contra sus labios, después de romper ese beso húmedo. Kim hizo lo que le pedía,  sin mencionar algo.

Park Yoochun casi llego a su clímax, con tan solo preparar a Kim. Quien comenzaba a jadear con esas íntimas caricias. Recorrió con besos húmedos aquel pasaje estrecho, haciéndolo jadear roncamente.   
Golpeo un par de veces esos blancos glúteos, haciéndolos enrojecer tenuemente… antes de introducirse en él. Junsu que estaba ya en cuatro ‘patas’ gimió alto al sentir ese miembro grande e hinchado dentro de él. Park gruño al sentir la estrechez del pelirrojo. “Ohh babyh”
Las embestidas fueron fuertes y certeras. Yoochun se aferraba de las caderas de Kim, quien solo podía entregarse a ese gran placer.  Junsu quien tenía su espalda arqueada y la cabeza echada hacia atrás, llego al que sería su segundo orgasmo de la noche. Mientras Park se corría dentro de él, marcándolo  como suyo. Salió de Junsu, quien se desplomo sobre la cama y el pelinegro se recostó a su lado. “Y bien, te agrado?” comento con una gran sonrisa en su rostro. “Claro, fue estupendo, Yoochun-ah” respondió igual de sonriente Junsu, mirando esos ojos profundos, que aun lucían severos y  deseosos.

“Junsu-ah, me encantaría atarte… me encantaría hacer muchas cosas contigo, pero solo lo podre hacer, si tú estás de acuerdo” Susurra mirando esos ojos avellana, que lucen tan inocentes que no quiere corromper ese aura infantil, pero es ese mismo el que le ha atraído a él. Toma la mano de Junsu, dándole un leve apretón, recorre con su pulgar los nudillos de aquí para allá… y el pelirrojo se estremece. La carga eléctrica recorre su piel bajo la gentil presión del pulgar del pelinegro, enciende una vez más la corriente sanguínea y pulsa alrededor del cuerpo del menor, calentado nuevamente todo en su camino.

La respiración de Kim se hace difícil, parpadea hacia él, sonríe con timidez, sus ojos avellana lo miran en busca de alguna respuesta… pero Junsu sabe que la respuesta está en él, no hay más que su decisión. “Yoochun-ah…” su voz muestra los nervios que siente, nunca ha hecho algo así, pero es ese hombre apuesto, ese que no conocía hace apenas unas horas… ese por el que apostaría todo por seguir junto a él. “Nunca… he hecho algo por el estilo… tendrás que ser bueno conmigo” Dice en apenas un susurro con una tierna y cálida sonrisa en su rostro. Park sonríe aun mas y asiente… lo abraza y lo llena de besos cortos por todo su rostro, cuello y hombros. “Claro que seré bueno, nunca me había sentido tan completo con alguien… tenlo por seguro que nunca te haría daño, Junsu-ah” sus labios se encontraron reiteradamente compartiendo un beso lleno de ternura y pasión.



Taken




T A K E N




Autor: EunKyo
Pareja: YunJae
Otras parejas: KyuMin, YooSu.
Género: Slash, Romance
Advertencia: Lemon
Extensión: Two-Shot